Mientras el plan de captación de vivienda ofrecerá alquileres un 20% más baratos en Zaragoza este año, son muchos los habitantes de la ciudad que están optando por alejarse un poco del centro, aprovechando la implementación definitiva del teletrabajo, para asentarse en algunas zonas algo más alejadas de la capital aragonesa.
Esto es lo que se viene observando en los últimos años, con especial impulso en los meses recientes, casi como un revival de lo ocurrido durante los tiempos de la burbuja inmobiliaria, en los que las oportunidades lejos de la ciudad abundaban.
A día de hoy, no quedan dudas de que se dispara la construcción de viviendas en el área metropolitana, algo de lo que dan cuenta las estadísticas recientes de organismos facultados, como el Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Zaragoza –COAATZ-, responsable del visado de las direcciones de obra de los distintos proyectos.
Cuarte y Utebo, los preferidos para asentarse
Ellos mismos explican que hemos pasado de las 67 iniciativas anuales registradas en 2015, a las 186 de 2020, incluso con las complicaciones que supone el hallarnos en plena pandemia, lo que hace suponer que la tendencia seguirá al alza.
Según Lucio de la Cruz, gerente del COAATZ, a Heraldo «el sector está más animado, pero siempre con la sensatez y la sostenibilidad con que se están haciendo ahora las cosas».
De hecho, hasta se prevé que este 2021 también deje pequeñas las cifras del año pasado, puesto que el primer cuatrimestre da cuenta de 143 viviendas iniciadas, frente a las apenas 30 del mismo período en 2019, y las 97 de un 2020 ya más movido.
Buscando más espacio para la familia
Sobre los destinos que parecen atraer más a los zaragozanos que se alejan de la metrópoli, destacan especialmente Cuarte y Utebo, si bien «hay otros focos de actividad pero de menor volumen y localidades como Villanueva de Gállego».
El apetito de pisos grandes, entendiendo éstos como aquellos que superan los 80 metros cuadrados, parece ser el denominador común entre las personas que deciden salir.
Siempre para los meses de enero, febrero, marzo y abril de este año, casi la mitad de las viviendas adquiridas tienen ese tamaño, como mínimo.
