Muy buenas noticias para los ciudadanos de Zaragoza, sobre todo aquellos que pasan de las opciones tradicionales en movilidad y valoran especialmente esas soluciones nuevas, como vehículos de movilidad personal, entre ellos motocicletas, bicicletas y patinetes.
Ellos deben saber que una de las firmas del sector, Reby, ha anunciado el despliegue de un total de 450 motos eléctricas compartidas en la ciudad, lo que supone el regreso definitivo de un servicio que había tenido éxito durante los meses previos al Covid.
A través de un comunicado oficial, el propio Ayuntamiento ha confirmado esta novedad, explicando que las motos eléctricas en cuestión se sumarán a los patinetes eléctricos, disponibles hace un tiempo, y las bicicletas compartidas, que volverán pronto.
Reby regresa, a la espera de Cabify
En cualquier caso, lo cierto con el regreso de Reby, quedamos a la espera de Cabify, firma de gran trayectoria en esta industria a nivel nacional, y que prevé iniciar en enero su explotación de las licencias obtenidas, con otras 450 motos eléctricas propias.
De este modo, el escenario de la movilidad compartida en Zaragoza sigue desarrollándose. Lo hace de modo ordenado, y con la expectativa de que vayan apareciendo nuevas opciones, cada una de las cuales tendrá sus características para aportar.
Tal es la relevancia que tiene la presentación de estas motocicletas, que en su lanzamiento ha estado presente el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, junto a la consejera de Servicios Públicos y Movilidad, Natalia Chueca, y uno de los fundadores de Reby, Pep Gómez.
Idribk y Reby pondrán las bicis eléctricas
Así como la Nueva Ley de Tráfico había dejado a Zaragoza sin patinetes y bicis, poco a poco se observa una mejora en este sentido. Mejora que se completará con la llegada de las bicicletas administradas por Idribk y Reby, las que ganaron estas adjudicaciones.
En resumen, Idribk pondrá en marcha 1.250 bicicletas y Reby otras 840 bicicletas. Debemos destacar, eso sí, que sólo el 20% serán eléctricas y el resto mecánicas. Igualmente se trata de un avance, pensando en dejar de lado los automóviles.
«Es una movilidad que nos permite una libertad de movimientos que nunca habíamos conocido que complementa a la perfección al servicio público de transporte y una alternativa para dejar el coche en casa», ha argumentado Jorge Azcón.
