Iberdrola, compañía liderada por Ignacio Galán, ha instalado con éxito el primer aerogenerador de la región francesa de Bretaña en el parque eólico marino de Saint-Brieuc. En total, el parque contará con 62 aerogeneradores con una capacidad conjunta de 496 MW, suficiente para producir 1.820 GWh/año renovables y libres de emisiones, lo que equivale al consumo anual de electricidad de 835.000 familias, incluido el sistema de calefacción.
Los aerogeneradores se están fabricando en Francia, en el polígono industrial de Siemens Gamesa Renewable Energy, ubicado en el puerto de Le Havre. Cada uno de ellos cuenta con una potencia unitaria de 8 MW y su fabricación y montaje ha permitido crear alrededor de 900 empleos.
Además, el montaje mecánico y eléctrico de los elementos internos de las torres de los 62 aerogeneradores, montadas previamente por la empresa vasca Haizea Wind en el puerto de Brest, seguirá movilizando cerca de 40 puestos de trabajo.
El parque eólico marino de Saint-Brieuc, de marcado sello español, también ha contado con la participación del consorcio Navantia – Windar, encargado de las plataformas eólico-marinas (jacket), construidas en el astillero de Navantia Seanergies en Fene (A Coruña). Estos trabajos han supuesto la creación de 1.000 empleos.
«El éxito de la instalación de la primera turbina eólica marina del parque eólico de Saint-Brieuc representa un gran hito para Bretaña y para el proyecto. Significa que entramos en la recta final de construcción del parque, que permitirá la producción de energía renovable y libre de emisiones de carbono para los bretones. Tras más de una década de esfuerzos y compromisos de la región de Bretaña, de los actores locales y de los equipos de Iberdrola, este primer aerogenerador es también la culminación de una gran aventura industrial, de la que todos podemos estar muy orgullosos», afirma Emmanuel Rollin, director general de Iberdrola Francia.
2.500 millones de euros de inversión
El de Saint-Brieuc será el primer parque de energía eólica marina del Grupo Iberdrola en Francia, una vez que entre en operación en 2023. Situado a unos 16 kilómetros de la costa, contará con una superficie de 75 kilómetros cuadrados. Su construcción ha supuesto una inversión de cerca de 2.500 millones de euros.
Esta nueva instalación muestra la apuesta de Iberdrola, de la mano de Ignacio Sánchez Galán, por el mercado francés, en el que la compañía prevé invertir unos 4.000 millones de euros hasta 2025, principalmente en proyectos renovables.
La planta se convertirá en el cuarto parque eólico marino de la compañía en funcionamiento, tras West of Duddon Sands, ubicado en el mar de Irlanda; Wikinger, en el mar Báltico; e East Anglia ONE, uno de los desarrollos eólicos marinos más grandes del mundo, situado en la zona sur del mar del Norte.
La energía eólica marina es una de las claves del crecimiento de Iberdrola. Al igual que el Grupo fue pionero en su apuesta por la energía eólica terrestre hace dos décadas, la compañía lidera el desarrollo de la eólica marina.
Iberdrola cuenta con una cartera de proyectos en Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Polonia, Suecia, Irlanda, Taiwán, Japón, Filipinas y Brasil, que se podría incrementar en los próximos años gracias a las numerosas subastas en las que está participando.
La estrategia crecimiento sostenible del Grupo Iberdrola basada en promover la electrificación de la economía a través de la inversión en energías renovables, redes eléctricas y almacenamiento energético le ha permitido convertirse en un líder energético global.