Allá por el mes de octubre del año pasado, comentábamos que la operadora de alta velocidad Ouigo realizaría seis paradas en Zaragoza a partir de 2021, una realidad que ya se está viviendo desde esta semana en la capital aragonesa, generando un gran entusiasmo entre aquellos que deben viajar alrededor del territorio nacional.
En concreto, se observa una enorme expectativa tras el primer viaje del AVE de Ouigo desde Zaragoza, un evento que mereció la presencia del propio alcalde de la ciudad, Jorge Azcón, junto a otros representantes del Ayuntamiento local.
Esto, en virtud de la llegada del primer tren de Ouigo procedente de Barcelona y con destino a Madrid, que partió de la Estación Intermodal de Zaragoza-Delicias a las 12.06 para llegar a la capital del país a las 13:25 horas, según consignaron fuentes de la compañía francesa.
«Buenas noticias» para los vecinos zaragozanos
El propio Azcón aseguró que estamos experimentando «buenas noticias» gracias a la liberalización de este servicio ferroviario, que repercutirá directamente en la formación de precios en el sector, allanando el camino para una fuerte reducción del valor de los billetes.
En estos tiempos de crisis, el alcalde también afirmó que «las familias completas podrán decidir cambiar el coche por la alta velocidad», lo que significará que «mucha gente dejará el coche en casa y viajará en alta velocidad» beneficiándose de los costes, más asequibles.
Asimismo, el máximo mandatario de la ciudad aventuró que el paso de este transporte «va a tener un impacto en el turismo» en la capital aragonesa, encontrando facilidades para disfrutar de su patrimonio histórico, como así también de la cultura y gastronomía.
Fin al monopolio de Renfe
Además, el desembarco de Ouigo pone punto final al monopolio de Renfe de ocho décadas. Elena Allué, directora general de Turismo del Gobierno de Aragón, definió estas circunstancias como una muestra de los «grandes cambios» que se están dando en el sector, basados en la diversificación de servicios y las nuevas tecnologías.
Por supuesto, habrá que ver qué ocurre en las próximas semanas, atendiendo a situaciones como la avería sufrida durante el día de ayer, y que causó un retraso de más de dos horas en la entrada de la formación a Zaragoza desde Barcelona. Evidentemente, con el paso del tiempo, estos contratiempos deberían ser sólo la excepción.
