Cuando decidimos iniciar un tratamiento de ortodoncia hay una pregunta que debemos hacernos ¿qué podemos comer? Sin embargo, cuando se trata de la ortodoncia invisible Invisalign no hay que preocuparse demasiado por este tema, ya que la respuesta es que se puede comer de todo.
Una de las principales diferencias entre los brackets tradicionales y la ortodoncia Invisalign es que ésta es extraíble. De esta forma, no tenemos que llevarla puesta para comer y esto nos permite tomar todo tipo de alimentos. Por el contrario, si llevamos a cabo un tratamiento de ortodoncia con brackets sí hay que hacer ciertas modificaciones en nuestra dieta, ya que, al ingerir cierto tipo de alimentos, pueden quedarse restos entre el aparato y los dientes o incluso llegar a dañarlo.
Por tanto, con la ortodoncia Invisalign, siempre y cuando retiremos los alineadores, podemos comer alimentos muy sólidos, duros, fibrosos… algo que no es posible con los brackets. Sin embargo, también hay que tener en cuenta un aspecto importante en este tratamiento, y es que para que sea efectivo, el aparato Invisalign debe permanecer en nuestra boca 22 horas al día, lo que quiere decir que no podemos ponerlo y quitarlo a nuestro antojo. Tendremos que planificarnos para que las horas que no llevemos los alineadores coincidan con nuestros tiempos de comidas.
Además, no necesitamos quitarnos nuestro aparato de ortodoncia Invisalign para beber agua o bebidas frías. No obstante, los líquidos calientes sí que podrían dañar los alineadores, por lo que tendremos que retirarlos si queremos ingerir este tipo de bebidas.
Sí que es cierto que es recomendable ingerir alimentos blandos que no requieran ser masticados con fuerza cuando nos acabamos de poner el alineador Invisaling. Sin embargo, solo hay que tener esta precaución durante las primeras horas desde su colocación, a diferencia de otros tratamientos disponibles en clínicas de ortodoncia invisible, como los implantes dentales, en los que se recomienda hacer dieta blanda durante semanas e incluso meses.