Los sistemas de dosificación química aseguran que las calderas de vapor trabajen dentro de los parámetros adecuados y se eviten problemas de corrosión e incrustación.
Las calderas de vapor son elementos que, mediante el uso de combustible, calientan el agua y generan vapor necesario para la operativa de una instalación o para la generación de energía. En la industria española, cada vez es más frecuente encontrar este tipo de calderas, y en Zaragoza ya podemos encontrar varias empresas que las comercializan.
Cuando las tuberías por donde se transporta el agua son afectadas por algún problema como la corrosión o la incrustación, se deterioran y disminuye la eficiencia en la operación y la vida útil.
Los sistemas de dosificación química actúan inyectando productos como fosfato, amoniaco y desoxigenante, buscando lograr un tratamiento adecuado para ajustar el pH, conductividad y oxígeno disuelto a los valores necesarios para evitar corrosión e incrustación.
Los sistemas de dosificación química a calderas se componen de depósitos, bombas dosificadoras, bombas de trasvase y cuadro de control, así como de elementos auxiliares mecánicos como válvulas de corte y de seguridad.
El sistema se puede automatizar a demanda, pudiéndose incluir PLC programable para que gestiones el arranque/paro de bombas en función de las señales de proceso recibidas y de los instrumentos locales como transmisores de nivel y caudalímetros.
Los sistemas de dosificación química se pueden instalar dentro de un contenedor climatizado que protege los equipos del ambiente, ubicándoles en un lugar climatizado e iluminado. El acceso está limitado a personal autorizado el tener puertas con llave, que por dentro disponen de barra antipánico.
Para comprobar el estado del agua de caldera, se analizan en continuo las variables del circuito principal (pH, conductividad, oxígeno) mediante un sistema de análisis y muestreo de agua y vapor. En función de los valores de estos parámetros se programan lazos de control para gestionar la inyección de los químicos.
Los expertos de la empresa de Fluideco pueden asesorar sobre el programa de dosificación y análisis más adecuado en función de la caldera utilizada.